domingo, 4 de septiembre de 2011

Canadá, la costa del Este.


Toronto de noche
Glacier Park, EE.UU 28 de Agosto 2011 -


Toronto, Montreal, Gaspé, Quebec, Ottawa y Niagra.


El Downtown de Toronto
Hola familiares amigos y seguidores, ante todo queremos pediros disculpas por el enorme retraso que hemos acumulado. Sin ánimo de poner excusas llevamos un mes en el coche con unos 10.000 km recorridos y no hemos parado, vamos de camping en camping y de tanto en tanto descansamos en algún motel de carretera. Pero hacemos los días tan largos que cuando llegamos a un sitio estamos tan agotados que no tenemos fuerzas para nada, sólo una noche nos fuimos muy tarde a dormir, fue en las Vegas, pero allí estuvimos jugando a la ruleta y… Bueno, eso ya lo contaremos más adelante, la cuestión es que nos hemos ido retrasando, y tenemos un montón de cosas que contaros. Hoy toca Canadá, y estamos escribiendo en la mesa de picnic de un camping en medio de un parque natural llamado Glacier, hace un minuto ha venido un “ranger” (guardaparque) para advertirnos que se ha visto a un oso merodeando por los alrededores y que debíamos estar alerta… Así que, insistimos, sin ánimo de poner excusas, si ningún oso nos lo impide os relataremos nuestras andanzas por el Canadá.
El times square de Toronto
Tras nuestra visita a Cuba tomamos un avión desde Varadero hacia Toronto y nos hospedamos en un Hostel de la ciudad… Vaya cambio, después de un primer paseo por la ciudad descubrimos que allí se podía encontrar de todo!!! Había supermercados con miles y miles de productos!!! Tiendas de ropa para todos los gustos y tiendas de rarezas varias que nos tenían embobados ante los escaparates. Estábamos maravillados de poder encontrar cosas que no habíamos conseguido desde hacía meses!!! Y naturalmente alguna cosilla más. Nosotros no tenemos mucho sitio en la mochila, pero alguna que otra cosa no se nos pudo resistir; Quique se compró dos pares de pantalones nuevos, acatando el consejo de su primo Alejandro que ya en Bolivia le sugirió un cambio de atuendo… Y Blanca… bueno, al final Blanca le acabó pidiendo a Quique el último hueco de su mochila porqué la suya estaba a punto de reventar!!! Pero no todo fueron compras; también visitamos la ciudad.




Estación de tren de Toronto
Vimos su mercado, su estación de tren y paseamos entre sus altos edificios y frente al lago Ontario pero sin duda, el edificio que más nos sorprendió fue la Torre CN, una torre de telecomunicaciones de 553 metros de altura.

CN Tower


 
Esta torre se construyó a mediados de los 70 y Toronto presumió durante años de tener el edificio más alto del mundo. Quique no podía resistirse, así que convenció a Blanca para subir a su mirador. La torre es un edificio de hormigón y se construyó mediante la técnica de encofrado deslizante y Quique que hacía poco que había trabajado en un “deslizante” estuvo insistiendo a Blanca sobre el mérito que tenía haber construido una torre tan singular… Un sistema de encofrado deslizante es un encofrado que no se retira tras un vertido de hormigón. En un “deslizante” el encofrado se va empujando de manera que en uno de los extremos se vierte hormigón fluido mientras que en el otro extremo va asomando el hormigón endurecido. Por ejemplo, en algunos silos de sección circular se disponen dos anillos de encofrado concéntricos (uno para la cara exterior y otro para la cara interior) cuya altura normalmente es de poco más de un metro. Luego, a la vez que se va llenando se van izando los dos anillos a la vez, de manera que por debajo del encofrado va quedando el hormigón duro, dejando una pared continua de hormigón de sección circular. Lo único que hay que procurar es de que no se interrumpa el vertido hasta que la pared alcance la altura deseada, proceso que puede durar varios días, semanas o incluso meses según la altura ya que la velocidad de izado es de unos pocos centímetros a la hora. Hasta aquí muy fácil!!! Pero en la torre CN la cosa es diferente. Si se hace un corte en la base y otro unos metros más arriba, la forma es distinta, tienen distinta sección y no sólo eso, si se mira la torre desde lejos se ve que la torre es hiperbólica (parecido a la torre Eiffel) así que para esta torre el encofrado que se iba izando debía ir girando durante el proceso… Nada, que mu, mu, complicao!!!!
Atardecer en toronto

 Dejándonos de estas particularidades aburridas, las vistas desde el mirador son espectaculares; se puede ver toda la ciudad desde lo alto ya que el mirador está situado muy por encima de los demás edificios… Subimos por la tarde y estuvimos hasta que se hizo de noche para ver las lucecitas…




Reflejo de Kike y Blanca en el museo de arte de Toronto
   
Desde Toronto tomamos un autobús hasta Montreal y allí nos hospedamos en casa de Louis y Josiane, una pareja encantadora que conocimos gracias a la red de Couch Surfing.
Kike y Blanca con Louis



con Josiane

Ellos nos ofrecieron toda su hospitalidad y nos contaron su vida cuotidiana en Canadá. Montreal es muy distinto que la mayoría de ciudades norteamericanas puesto que tiene un centro histórico muy similar al de las ciudades francesas, nos daba la sensación de estar paseando por las calles adoquinadas de París. Además, sin saberlo nosotros, habíamos llegado justo cuando empezaba el festival internacional de jazz de Montreal y se respiraba un ambiente totalmente festivo en la ciudad y pudimos disfrutar de muchos conciertos!!!


 
En especial, hubo un grupo que nos gustó muchísimo. Se llamaban The Soul Rebels y eran una formación a base de instrumentos de viento metal; tubas, trombones, trompetas, tenían un sonido de lo más enérgico y nos hicieron bailar durante toda su actuación.


Vista de Montreal



Casco antiguo de Montreal
 Ya en coche de alquiler y tras visitar Montreal nos dirigimos hacia el Norte siguiendo el rio San Lorenzo o St Laurent como dicen por aquí y llegamos a una población llamada Tadoussac.




Ferry para cruzar el St. Laurent.


Éste es un bonito pueblo costero bastante turístico debido a que es una zona de avistamiento de ballenas. Nosotros paseamos por la costa escudriñando el rio pero no hubo manera, además se puso a llover, así que nada, no vimos ninguna ballena.
Tomamos un ferry para cruzar el rio y llegamos a la península de Gaspé, una región bastante deshabitada y boscosa en el interior.



Los Bosques de Gaspé- Réserve faunique des Chic-Chocs

Con el coche, durante una semana, rodeamos la península por la costa parando en los pequeños pueblos costeros y asomándonos a sus acantilados. El tiempo tampoco nos acompañó mucho esta vez ya que entre la niebla y la lluvia apenas vimos el sol


La costa Gaspé



En Percé y l'Ille de la Bonaventure

Vistas de Percé



Dos de los faros de la penísula de Gaspé





Vistas del arco de L'ille de la Bonaventure en Percé en un instante de sol.




Kike en Percé




Atardecer en Cap d'Espoir


Las siguientes fotos fueron tomadas en el Parc Natural Du Bic











Ya de vuelta de nuestro Tour cruzamos el rio San Lorenzo otra vez, esta vez por el segundo puente de Quebec, una maraña de hierro construida en 1917 (el primero se vino abajo durante su construcción en uno de los peores accidentes de la historia de los puentes). 
El gran castillo de Fontenac


Las calles de la ciudad de Québec.



Ya en Quebec queríamos hacer un paseo tranquilo por la ciudad pero para sorpresa nuestra habíamos coincidido con la visita oficial de los recién casados príncipes William y Kate, así que su centro histórico estaba vallado.


William, Kate!!!...Estamos .aquí, aquí,..un saludo por favor!!!


El casco antiguo de Québec
Paseamos por donde pudimos hasta que al final desistimos e hicimos lo que estaba haciendo todo el mundo; ponerse detrás de una valla a esperar por si pasaban. Estuvimos una buen rato esperando; Quique quería hacerles un retrato fotográfico para poder enviárselo a su abuela María, que siempre gusta de estas cosas. –Quina il·lusió li farà a la meva àvia que els hi faci una foto als prínceps saludant!!- decía. Así que Quique retuvo a Blanca frente a la valla aguardando para tomar la valiosa instantánea… Y después de esperar más de una hora y media pasaron los príncipes!!! Sí, pasaron a toda velocidad por delante nuestro con su coche de lunas tintadas y no vimos nada de nada. El pobre Quique se quedó con la misma cara con la que se debieron quedar los habitantes del pueblo de “Bienvenido Mr Marshall” cuando pasaron los americanos!!!. ¡Tanta espera para nada! -Ho sento àvia no vam poder fer la foto però ens quedem tranquils per que sabem que tens la “Hola”… Cuando los príncipes se fueron ya se pudo caminar por el centro de Quebec sin más problemas y pudimos ver el Chateau de Fontenac, el edificio más famoso de Quebec, que, para más inri, recuerda a esos de los cuentos de príncipes y princesas… Así que nada, ahí va el retrato del castillo.
Exin castillos a gran escala.
Después de visitar Quebec volvimos a Montreal donde devolvimos el coche y cogimos el tren en dirección a Ottawa.


Nos hospedamos en el Internacional Hostel, éste era un poco particular, el edificio del Hotel había sido una antigua prisión.


Como se puede observar el Hostel tenía una atmosfera muy acogedora!
Las habitaciones eran antiguas celdas de reclusos, incluso habían conservado los barrotes, la verdad es que era un poco tétrico; suerte que sólo eran dos días…
Otawa, como la capital que es, está llena de edificios oficiales, y esta vez nada de parecidos con Francia, el parecido lo tiene con Londres, hasta hacen un cambio de guardia igual que en el palacio de Buckinham, es lo que tiene ser de la Commonwealth. Ottawa, además es una tranquila ciudad muy agradable para pasear, hay un mercado lleno de pequeñas tiendas de cosas curiosas y tiene un bonito paseo al lado del rio.


Ottawa

Las calles del centro de Ottawa

Londres y su...ups, no!!!....sigue siendo Ottawa y su cambio de guardia.


Las esclusas del Canal Rideau que unen Otawa con el lago Ontario

Musée des beaux arts du Canada y la araña mamá de Louise Bourgeois ( tiene 8 hermas por el mundo, una en Bilbao)
De nuevo en tren, nos dirigimos hacia Niagara Falls, en el lado canadiense de las cataratas del Niagra (desde dónde no hay que pagar para verlas).


Niagra Falls




 Y paseamos por su gran avenida viendo caer el agua. La ciudad de Niagara Falls en otros tiempos era un destino típico para lunas de miel, y está llena de ofertas turísticas, casinos, actividades varias, vistas de las cataratas desde arriba, desde abajo, por detrás…







Nosotros con el paseo principal (y gratuito) ya estábamos satisfechos así que el resto se lo dejamos a los recién casados. Si que hubo una cosa que nos llamó mucho la atención; el Spanish Aerocar.

 Después de caer el agua por las cataratas, el rio baja con fuerza y realiza un gran giro en una zona llamada “The Whirpool” que como su nombre indica es una zona donde se forma un gran remolino. El rio en este lugar se puede cruzar a bordo de un teleférico diseñado por un ingeniero español llamado Leonardo Torres Quevedo en 1914. Este ingeniero es famoso también por diseñar dirigibles, autómatas, máquinas de jugar al ajedrez y máquinas algebraicas (pioneras calculadoras) e incluso por desarrollar aparatos de radiocontrol a principios del siglo XX… O sea una especie de Leonardo da Vinci o de Thomas A. Edison español pero, lamentablemente, no muy conocido.

Desde Niagara Falls cruzamos el río para entrar en los Estados Unidos y después de un breve trayecto en autobús llegamos a la ciudad de Buffalo. Allí cogimos nuestro avión hacia Chicago donde nos esperaba Will, uno de los mejores amigos del primo de Quique, Alejandro… Nuestras aventuras en Chicago os las contaremos en breve. Si los osos nos lo permiten claro.








2 comentarios:

  1. ya era hora...yo ya os hacía por Vladivostok!
    Esta chica Josiane, se parece mucho a Blanca no?

    un beso

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  2. Me dais mucha envidia. Pasadlo muy bien y cuidaos mucho. Muchos besos de Álvaro, Maria, Alex y yo.

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